martes, 3 de junio de 2008

Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal (I)


Que conste: no soy crítico de cine, nunca estudié artes cinematográficas. Es más, mi gusto podría ser muchas veces dudoso ya que bazofias que no deberían gustar a nadie me gustan y obras maestras que a todos gustan me aburren. Pero esa es la esencia del individualismo, no seguir las convenciones culturales. Aún así, aquí les dejo mi impresión sobre:

Indiana Jones y el Reino de la Calavera de Cristal (puff, :P, desde ahora I4) es una de esas películas que uno quiere que le gusten. Al fin y al cabo, es una peli de Indy, el héroe de aventuras por antonomasia. Nuestra infancia, adolescencia, adultez, tercera edad (me refiero a tí Lo) no hubiese sido lo mismo sin Indy.

Uno acude al cine esperando pasar por la misma experiencia, salvando la distancia de 20 años, claro. Es obvio que tío Ford ya no puede hacer lo mismo que antes, pero estamos dispuestos a perdonárselo. Lo que queremos es aventuras, y las hay, pero... el sabor no es el mismo. De veras quería que me guste esta película, y sin embargo me duele decir que no. Así que aquellos que no la hayan visto paren aquí, porque pienso destriparla y quejarme, plaguearme e insultar a Lucas y sus antepasados. Alerta de spoilers a partir de aquí.

La mala vibra (om om) ya comienza con el título, por dos razones: rimbombante y aliterado (en inglés) para tratar de convencernos que la nueva peli remite a los seriales pulps como las anteriores (lo cual no estaría mal, pero es mentira). De seguro idea de Lucas, al que le gustan esta clase de títulos. La segunda razón y la que más me molestó: el objeto de la búsqueda. La calaca de cristal, como sabrán (o sino vayan a la wikipedia) se relaciona con las teorías de los Dioses del Espacio, es decir que las antiguas civilizaciones adoraban a extraterrestres (me trago un gargajo). ¿Indy con extraterrestres? ¬¬ Permítanme un momento de perplejidad... Aún así estaba dispuesto a perdonar esto y ni que decirles que me senté en la butaca del cine con la piel de gallina.

Pero pasemos a la película en sí. Luego del logo de Lucasfilm (todo verdecito, como lo que tanto le gusta a Jorgito) mis esperanzas reflotaron. El logo de Paramount de los 80`s, clásico, se funde en un montículo de tierra del que sale ... atájense... ¡un perro de la pradera en CGI! Sep, el bendito y omnipresente CGI. No me malinterpreten, no tengo nada contra el CGI, pero cada cosa en su lugar y aquí parece fuera de lugar e innecesario. ¿Por qué? ¿Para qué? Los animales en CGI nunca parecen reales, a diferencia de las criaturas varias, porque todos sabemos cómo se ve un animal de verdad. Sólo en Narnia me pareció real el Leoncio y eso es porque en tanta fantasía era aceptable y pegaba. Aquí no. Mis peores temores comenzaban a resurgir...

La música de Bill Haley nos lleva hasta el área 51 (que por cierto, uno pensaría que estaría un poco más protegida de lo que se ve) donde nos enteramos que los rusos secuestraron a Indy para que les ayude a buscar una caja con ciertos restos en los que están muy interesados. Aquí vemos por primera vez a los participantes de este show: Indy, 20 años más viejo de lo que recordamos, baqueteado por la vida (no son los años, es el kilometraje), su rostro amenazando con deshacerse frente a nuestros ojos (bah, ni tanto). La Dra. Irina Spalko, la mala malosa de turno con supuestos poderes paranormales, Cate Blanchet con peluca, un personaje del que no sé que pensar; no parece muy amenazador, aunque eso tal vez se deba a que nunca experimenté la paranoia de los yanquis con los comunistas, pero el público actual tampoco; de alguna manera, los nazis siempre parecen más amenazadores y todos estamos programados a odiarlos. Tal vez Spielberg hubiese usado a los nazis como pensó primero (wikipedia dixit). Y también nos presentan al compañero de Indy, Mac (Ray "I AM BEOWULF!" Winstone), un personaje recalcitrante, poco desarrollado, molesto... ¿Se nota que no me gustó?

En esta presentación de personajes y motivaciones se dan los primeros chistes sobre la edad de nuestro héroe, no son de mal gusto pero tampoco necesarios. Y entonces se da para mí el momento que signa el tono del resto de la película: Indy le da una respuesta ácida a nuestra Coronela (a mí no me molestaría que la Blanchet me golpeara un poco, pero ese soy yo...) y está le devuelve una bofetada con el puño cerrado. Cuando volvemos a ver el rostro de Ford... Nada. ¿Y? me preguntarán ustedes, jóvenes borregos. Les respondo: no hay labio partido, ni una gotita de sangre, un poquito de rubor, nada. Y así será el resto de la peli: un ejercicio de autoindulgencia de Spielberg y Lucas totalmente inofensivo. A Indy no le pasará nada, apenas se ensuciará, apenas se golpeará, apenas nada.

Pasamos a la escena de la búsqueda de la caja, donde vemos que el hangar/galpón donde la buscan no es otro que aquel donde guardaron el Arca de la Alianza en el primer film. Otra vez CGI y bue, creo que las pinturas mate son muy poco para ILM. Por supuesto, Indy busca la caja con un poco más de CGI de por medio, la encuentra, vemos que contiene los restos de un ser extraño (bah, es un extraterrestre de Rosswell, pero más de eso más adelante), intenta zafarse amenazando con una pistola a 20 rusos, Mac lo traiciona, Indy golpea a un ruso mientras los otros 19 juegan al teto y comienza la primera escena de acción. Regular, o buena según les guste, pero para mí refleja otro cambio de los nuevos tiempos del cine: escenas de acción más largas y menos por película, que da como resultado una película desbalanceada, no como las anteriores. Además, como era de esperarse, es evidente que los dobles de Ford hacen casi todo, ya que apenas se le ve el rostro y se da la fórmula siguiente: Ford da un puñetazo, rusos caen del auto (no vemos cómo), Ford maneja el auto.

Todo termina con Indy huyendo de los rusos para llegar a un poblado que resulta ser un sitio de pruebas nucleares. Es aquí, que a mí parecer, se pasaron de la raya. Indiana sobrevive a una explosión nuclear metiéndose adentro de un refrigerador. Así como lo leen. Indy nunca fue un súperhombre, lo hemos visto ser golpeado, hipnotizado, recibir balazos y sufrir cada uno de estos avatares. Pero nunca quisieron mostrarlo como alguien invulnerable. Deben ser los efectos del Cáliz Sagrado... Y lo mejor al final de la escena: el maldito perro de la pradera en CGI.

A continuación Indy es interrogado por dos agentes del FBI que lo consideran comunista mientras el enemigo de Hulk lo defiende (un militar, el Gral. Ross). acá nos enteramos que Indy luchó por su país en la WWII, que ofició de espía, que se ganó chotocientas medallas... Por algún motivo no veo a Indy sirviendo al sistema, tal vez me equivoque. ¿Acaso no había cierta animadversión entre Indy y su gobierno en la trilogía? Punto menos para el espíritu salvaje de Indy, más para lo políticamente correcto.

Y ahora voy y me entero que él era hijo de Indy también.

Como consecuencia de lo anterior Indy es expulsado de su catedra en la facultad y vemos al reemplazo de Marcus Brody, el actual decano, al que apenas se le da tiempo de renunciar, tomar algo y desaparecer hasta su próxima fugaz aparición. Indy se embarca en tren hacia quien sabe dónde (más bien no lo recuerdo) cuando aparece la piedra de la discordia: Mutt Williams. Para nadie es secreto que es el hijo de Indy y Marion así que saquemonoslo de encima. Hace su aparición sobre una motocicleta al estilo de Marlon Brando. Y esto nos conducirá a la segunda parte de la aventura, pero hablaremos de esto más adelante, porque esta entrada se ha hecho larga y no creo que nadie haya llegado hasta aquí sin quemar algunos conos y bastones.

Hasta la próxima!


6 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues todavía no la he visto...
Y fíjate las ganas que tengo que me leo todas las críticas con spoilers... :P

Y lo de tercera edad... ¡ya me contarás cómo estás tú a mi edad, con tres churumbeles y una hipoteca...!

Jeral dijo...

Calla, dos niños máximo, que sino al tercero lo mandamos a limpiar parabrisas en los semáforos...

Oye, he intentado como 4 veces dejar un comentario en lo de "escritorio meme" de tu blog y nunca aparece. ?

Anónimo dijo...

Lo mismo es que eres muy torpe o que Akismet te considera spam...
Voy a mirar... o no...
¡Suerte con los trillizos!


Log

Anónimo dijo...

Ea, ya...


Log

Melmoth el Neuromante dijo...

Acabo de ver la película, sólo para venir a llevarte la contra XD

Bueno, en realidad esa no fue mi motivación, pero entre los comentarios de Log y los tuyos hasta la dejé de segunda opción (vi primero Iron Man) y me arrepiento. Considero que Indy 4 es un pedazo de película y fue a parar directamente al segundo lugar de mi ranking personal (el primero lo tiene La Ultima Cruzada, obviamente).

Eché mucho de menos a Sean Connery, aunque hubiese aparecido 5 min al final riéndose de su hijo.

En cuanto a los alienígenas, claro, mucha gente se mosqueó y los encontró poco creíbles. Porque por supuesto, el Arca de la Alianza y el Santo Grial son muchiiiiiisimo más creíbles

Los chistes sobre la edad los pidió Harrison Ford mismo, para reírse de la fobia a envejecer. Ni idea en cuántas escenas de pelea participó, pero de hecho entrenó para la película, algo tiene que haber hecho el hombre.

En cuanto a la escena de la explosión atómica, obviamente no tiene nada de creíble. Porque claro, las películas de Indiana Jones siempre han sido de lo mas creíbles...
La escena, de hecho, me encantó por ser profundamente metafórica: esta película muestra a Indy post segunda guerra mundial, la cual termina simbólicamente con la bomba atómica. E Indy sobrevive, milagrosamente, a este fin de una época, para caer en el nuevo mundo; la guerra fría y la paranoia comunista. Y esta vez Indy es capturado, interrogado, despreciado y ridiculizado. Indy no encaja en este nuevo mundo, claramente. Y es un militar viejo el que le salva el cuello.

Comparto que el personaje de Indy nunca se llevó bien con el gobierno, por eso lo de las medallas me parece poco creíble.

Lo de Shia y Brando es claramente un tributo, y una vez más me sorprende lo bien que lo hace este jovenzuelo, pese a lo mal que me cae. Sin embargo actúa perfectamente como greaser. Y, tal como lo pensó Spielberg, el personaje es todo lo que Sean Connery criticaba a Harrison Ford; rebelde, indisciplinado y violento.

La escena de la persecución en la selva tendría que haber durado por lo menos la mitad, pero aún así me pareció graciosa. La parte de los monos y las lianas, no.

En fin, me encantó la película. Cuando leo comentarios de "esperamos 20 años para esto" yo me pregunto, "¿Y que esperabas, Indiana Jones y los calzoncillos de Cristo?". Honestamente, ¿qué diablos esperaban que hiciera Jones, que aventura épica estaban esperando?

Indiana Jones es un arqueólogo. Y de hecho, hay más mitología y más investigación sobre el posible estado avanzado de tecnología de las civilizaciones antiguas, que sobre toda esa tontería religiosa cristiana de objetos sagrados. Indy es sci-fi y en sci-fi, prefiero mil veces un buen alienígena interdimensional, que una reliquia cristiana.

He dicho, carajo.

Jeral dijo...

Mel, Indy Sci fi? De veras?

Me parece señor, que está razonando fuera del recipiente.